Análisis Children of the Sun – Resolver puzles con un tiro

Children of the Sun es uno de esos juegos extravagantes y bizarros, pero con una premisa muy sencilla: matar a un grupo de personas con una sola bala y, quizás lo más curioso: con una sola mano.

El diseño del titulo es muy curioso. Se trata de un juego donde solo juegas con el ratón, utilizando únicamente tres botones para todas las habilidades disponibles. Solo por esa decisión de diseño ya llama la atención, ya que se acaba tratando de aprovechar al máximo lo mas mínimo, lo cual se traduce bastante bien a la premisa del gameplay, matar utilizando una sola bala.

Control

Cada nivel se divide en dos fases. Primero recorres los alrededores de la zona y te familiarizas con el lugar y la posición de las víctimas. Entonces aprietas el gatillo y empieza la segunda fase, matar.

Controlas la propia bala, y cada vez que está mate a alguien, se detendrá en el tiempo y tienes la oportunidad de cambiar la trayectoria.

Como todo buen juego de puzzles, a medida que avances, las posibilidades se amplían: Disparar a barriles explosivos para causar muertes en masa o simplemente encontrar un nuevo punto de vista para cambiar la trayectoria, la habilidad de acelerar la bala para atravesar armaduras o matar a los pájaros para tener la ventaja de la altura.

Este diseño hace que la experiencia sea tan fácil de jugar, que se vuelve rápidamente adictivo gracias a la sencillez de los controles y la premisa, que sumado a los aspectos visuales y sonoros elevan aun más el titulo y te engancha.

Variedad a la hora de matar

Se te van presentando distintos retos que mantienen la experiencia fresca. Los escenarios cambian constantemente, desde un edifico en llamas, donde ver a los enemigos a través del fuego complicará las cosas… Hasta una estación de tren, con vagones en movimiento que tendrás que tener en cuenta para matar a quien esté al otro lado.

Todos estos distintos escenarios que no solo cambian contexto sino la propia experiencia. Las distintas habilidades que vas desbloqueando y la libertad que tienes para resolver cada situación como mejor convengas, sea improvisando o creando una trayectoria premeditada, convierte una premisa tan sencilla en una experiencia súper entretenida.

Las habilidades que desbloqueas van desde girar ligeramente la trayectoria hasta acelerar la bala para atravesar a los enemigos con armadura. La más curiosa es la de cambiar la trayectoria en medio del aire, pero para ello primero debes acertar dos tiros en los puntos débiles de los enemigos para cargar esta habilidad.

Algunos niveles juegan con los convencionalismos del gameplay, colocándote en situaciones más extravagantes donde tu objetivo no es matar, sino indagar en la retorcida mente de la protagonista.

Hacerte cómplice de la matanza

El tono de Children of the Sun no solo es único; es especialmente caótico. Es como ver las páginas de un fanzine punk cobrar vida, un comic trágico y sangriento que se desenvuelve y desarrolla con la misma sutileza de un balazo.

Visualmente es rompedor, con muchísimo ruido visual donde absolutamente todo aspecto del juego parece que está gritando, desde los efectos visuales al matar a alguien, los escenarios misteriosos, sectarios y sobre todo ambiguamente apocalípticos y la historia contada a partir de cómics y niveles que se separan del gameplay principal para ofrecer una narrativa sorprendentemente desagradable de ver, en el mejor de los sentidos.

Pero en lo que destaca de verdad del tono es en justamente eso, meterte en el bucle. Al igual que en Hotline Miami donde la música machacona y las visuales saturadas, crujientes y ligeramente sucias hacían que te metieras en el mismo bucle que el personaje principal donde te disocias de la brutalidad de tus acciones, los efectos visuales, música y sobre todo efectos de sonido se sienten en tu propia carne cada vez que empieza la caza.

La tensión de la preparación, la adrenalina que aumenta con cada muerte y la satisfacción de completar cada nivel y ver el absurdo recorrido en amarillo que has hecho, solo posible gracias a unos poderes alimentados por una ira ciega, casi se siente como si estuvieras convirtiendo tu matanza en una obra de arte abstracta.

La narrativa motiva esta desconexión con esta matanza y alimenta una historia de venganza ciega. Nada importa, ni tu identidad ni tus enemigos, solo satisfacer la emoción de la masacre. No hay nombres, solo roles. Tu eres LA CHICA, con el único objetivo de acabar con LA SECTA, hasta finalmente encontrarte y matar a EL LÍDER. Se te despega tanto del contexto y te muestran solo los suficientes detalles para perder el apego a la cordura y te vuelve una fría francotiradora.

Algunos tiros fallidos, sin embargo

A pesar de la variedad que he mencionado, la cual ofrece una experiencia súper interesante y diferente en cada nivel, para cuando acabas tu matanza, sientes que ha faltado algo.

El juego ofrece menos de 5 horas de juego. La gracia es rejugarlo para encontrar el recorrido más óptimo y así conseguir la mayor puntuación posible, y quien sabe, con el tiempo quizás añaden más niveles o permiten crear niveles personalizados, pero por lo que es ahora mismo en cuanto a contenido, 15€ puede ser poco demasiado.

A medida que el juego avanza los niveles se sienten más como retos donde importa más una ejecución enrevesada y se pierde la inmersión de otros niveles donde te sientes como un peligro incontrolable obsesionado con matar.

Además hay sólo dos niveles narrativos y creo que se hubiera agradecido alguno más para aumentar la inmersión y mantener más variedad y así conseguir que el final se sienta mas gratificante.

Bruto, hipnotizante y fácilmente adictivo.

Todo esto no son problemas demasiado grandes, es simplemente que no es la intención del titulo cumplir con estas expectativas. La historia se cuenta como se visiono, nos afecte o no a nosotros. Los niveles se diseñaron con una intención y escalada en mente y cumple con sus objetivos. Los personajes son feos y desfigurados casi como un reflejo de la propia narrativa, desdibujada a posta por la protagonista para justificar esta exagerada matanza.

Además, en lo que destaca el titulo es en ser un juego de puzles comedido y que se impregna en una estética violenta y tono caótico, y con eso cumple de forma sublime.

Es un título único que merece mucha más atención y sin duda lo recomendamos, pero tened en cuenta la relación tiempo y recompensa para decidir si os vale la pena comprarlo ahora o esperar a algún tipo de rebaja.