Cristina NavarroUn pequeño cuervo segador será el protagonista de esta curiosa aventura
Acid Nerve es un equipo de dos personas de Manchester, Reino Unido, que realiza juegos independientes con artistas de todo el mundo. En julio lanzaron Death’s Door en Xbox y PC. Ahora, ya se encuentra disponible también para las consolas de Sony y Nintendo. Por ello, te dejamos con nuestro análisis del juego a continuación.
Death’s Door
Death’s Door nos pondrá en la piel de un cuervo que, como cada día, tiene que ir a la oficina a hacer su trabajo. Sin embargo, este es un tanto inusual: se dedica, ni más ni menos, que a segar almas. Cada vez que llega a la oficina acepta un contrato, atraviesa una puerta hacia un lugar distinto y explora dicho lugar hasta dar con el alma que tiene que segar para seguir con su rutina.
Sin embargo, un día las cosas se tuercen y es incapaz de hacerse con el alma que se le había asignado. De esta forma, conoce al viejo Cuervo Gris, quien nos pide ayuda para abrir una enorme y misteriosa puerta hacia, ni más ni menos, que la muerte. Para ello nuestra misión será hacernos con tres almas inmensas para darle a la puerta y conseguir que esta se abra. Y es aquí donde, realmente, comienza nuestra aventura.
La historia, como en la mayoría de los juegos indies, es simple. Aun así, consigue sembrar la curiosidad de qué habrá al otro lado de la puerta y te empuja a seguir jugando hasta completar el juego.
Completar la historia principal no te llevará más de 10 horas. Sin embargo, si quieres hacerte con todos los coleccionables o incluso conseguir el final secreto del juego, este oscilará entre las 15 y 20 horas de duración.
Puzles y exploración
El título es un juego de exploración. Tendremos que recorrer los diferentes escenarios buscando el camino correcto que seguir para poder llegar a nuestro objetivo. Sin embargo, para poder acceder a dicho lugar, tendremos que resolver infinidad de puzles y rompecabezas. Cabe decir que estos no son para nada difíciles, se hacen entretenidos y están muy bien implementados en el juego.
Y es que la exploración es uno de los puntos clave. No solo será necesaria para avanzar, sino también para conseguir diversos coleccionables que nos pueden ser de gran utilidad a lo largo del juego, o incluso nos ayudarán a conseguir el final secreto mencionado anteriormente.
Entre otras cosas, podremos hacernos con semillas, las cuales podremos plantar en diferentes macetas para así restablecer nuestra salud. También podremos adquirir diferentes armas, las cuales nos podremos equipar y así mejorar la fuerza o la rapidez de nuestros ataques.
Sin embargo, el “coleccionable” más importante del juego serán las almas. Cada vez que derrotemos a un enemigo, este nos dará su alma. Como si de Dark Souls se tratara, iremos recolectándola y estas serán de gran utilidad. Al volver a nuestra oficina central podremos intercambiar las almas por mejoras para nuestro personaje por lo que, cuantas más almas recolectemos, más mejoras podremos desarrollar.
Diseños pintorescos
Por el simple hecho de saber que nuestro protagonista es un cuervo ya se intuye que el diseño va a ser curioso. Y es que cada uno de los diferentes niveles hace uso de una paleta de colores, entornos y decoraciones diferentes. Con esto se consigue no solo darle un acabado visual increíble al juego, sino que, con solo ver una imagen de este, sabremos de sobra en qué nivel nos encontramos.
Podemos encontrar desde jardines verdes plagados de flores, hasta mansiones enormes y terroríficas, iluminadas únicamente por el fuego de la chimenea. La propia oficina central es un escenario completo en blanco y negro. Asimismo, el diseño de los personajes no se queda atrás. Y es que todos y cada uno de ellos tiene un diseño muy curioso y llamativo.
En cuanto al apartado técnico, gráficamente consigue lo que se propone. No busca ofrecer los mejores gráficos de la generación, sino crear unos entornos llamativos y vistosos. Como bien he dicho, cada nivel tiene un diseño único y muy característico en relación al resto.
Las mecánicas son bastante simples: moverte, rodar, atacar y lanzar ataques a distancia es lo básico que tienes que hacer para poder avanzar. Sí es cierto que, a lo largo de la aventura, irás adquiriendo nuevos poderes y habilidades. Aun así, el juego es muy sencillo e intuitivo. Y aunque los enemigos pueden llegar a ser bastante fuertes y machacarte muy rápido, el combate se basa en estrategia. Es decir, deberás aprenderte los patrones de ataque de los distintos enemigos para poder derrotarlos con mayor facilidad. Aun así, no te pondrán las cosas fáciles.
Por último, me queda mencionar la banda sonora. Me ha sorprendido gratamente la variedad de temas que hay en el juego. Los primeros, para introducir la historia, son más tranquilos y sosegados, acompañados únicamente por un piano durante los primeros acordes, o incluso instrumentos de cuerda o viento. Sin embargo, en las batallas contra los distintos jefes podemos llegar a escuchar incluso una guitarra eléctrica. La música se adecua muy bien a cada una de las situaciones y momentos de la historia.
Conclusión
Death’s Door es un juego que nos habla de la vida y la muerte, del esfuerzo por conseguir alcanzar nuestros objetivos, pero sobre todo es un camino hacia el aprendizaje y luchar por aquello que realmente consideras lo correcto.
Un juego de exploración y puzles con vista isométrica que nos enganchará desde el minuto uno y no querremos soltar para descubrir que hay más allá de la gran puerta misteriosa. Con un increíble diseño de niveles y de personajes, y una banda sonora muy variada, te perderás durante horas explorando todos los rincones de los diferentes lugares que podrás visitar.
Death's Door
Pros
- Diseño de personajes y niveles muy pintorescos
- Banda sonora muy variada
- Combates sencillos y dinámicos
Contras
- Historia muy simple
- Poca variedad de mecánicas en combate
Sergio Calzón
Arturo Tudanca