Sergio CalzónEl futuro es incierto y no sabemos si prometedor. Hemos podido explorar muchos mundos futuristas a lo largo de la historia de los videojuegos y sí, existen ciertos clichés sobre ellos, aunque algunos títulos como Neon Blood, tratan de luchar contra ellos. No todo son las corporaciones, sino que en esta ocasión, la policía tendrá un papel fundamental.
Seguro que eso de «las corporaciones dominan la ciudad», algo que ya hemos podido ver en otros videojuegos como en Cyberpunk 2077 e incluso el español Eden Genesis. Sin embargo, aquí hablamos de una pelea entre dos fuerzas del orden, la policía y las corporaciones. ¿Estarás del parte del pueblo o de los ricos? Bueno, poca opción tendrás, pues Axel McCoin lo tiene bastante claro.
Antes de pasar a contaros más detalles de este título, os recordamos su tráiler:
Axel McCoin oculta un pasado
Axel McCoin se despierta una mañana cualquiera con una sensación de resaca ya conocida, esto es debido al «Spark«, una droga a la que media población de Viridis se encuentra enganchada. Encarnaremos a este personaje, que como antiguo detective deberá ir recuperando poco a poco sus facultades, así como restablecer sus implantes cibernéticos que le permiten ahondar mucho más en las escenas de los crímenes.
Sin duda, esta es una premisa bastante llamativa, con momentos en los que la cabeza de nuestro protagonista da mil vueltas. Luchar contra el crimen y contra ciertas actualizaciones de software será nuestro cometido.
Lo cierto es que para tratarse de un juego de aventura donde también existe un sistema de combate (que no nos llega a convencer, pero de eso os hablaremos más adelante), tiene diálogos bastante densos. Por otro lado, sentimos que muchas veces estas conversaciones son algo «forzadas» sin mucha profundidad en lo que se ha de decir. Incluso llegado el momento final del juego los personajes parecen despedirse de una forma repentina. La sensación que nos ha dejado es de falta de tiempo, ya que al inicio de la aventura parecía haber mucha ambición y al final, la historia se siente acelerada.
¿Quizás esto cambie en un futuro si se decide hacer Neon Blood 2?
Implantes centrados en la investigación… ¡Y no sólo eso!
Al comenzar nuestra partida, se nos mostrará el uso de los implantes para la investigación. Este es un sencillo sistema que nos ilumina con colores fluorescentes marcas de sangre y lugares en los que desarrollar nuestras habilidades detectivescas. Esta es una mecánica que se explota bastante al principio, aunque no deja lugar al jugador a realizar conjeturas, sino que todo se encuentra perfectamente guionizado.
Esta podía haber sido una mecánica interesante, aunque realmente sólo tiene uso unas dos o tres veces a lo largo de toda la trama, por lo que nuevamente, sentimos que este aspecto ha sido dejado un poco de lado. El resto de implantes que iremos consiguiendo «despertar» en Axel McCoin se ganarán a través de combates y del propio transcurso entre los actos de la historia.
Un «maltratado» sistema de combate
Sí, el titular es completamente veraz. El sistema de combate está basado en los turnos, en los que podremos elegir entre atacar, defendernos, utilizar objetos o habilidades. Esto en un principio suena bastante bien e interesante, aunque desde ya mismo os advertimos: carece de profundidad. Nada más comenzar el juego contamos con habilidades como headshot, que nos asegura constantemente estar haciendo críticos (para qué queremos más). Esto ha hecho que nos pasemos todo el juego utilizando únicamente esta habilidad, ya que directamente… ¡Es lo que mejor funciona!
Por lo demás, los enfrentamientos existen en contadas ocasiones (unas 10) y en aproximadamente 5 de ellas veremos enemigos repetidos. Nuevamente, este sistema creemos que podría contar con un mejor balance y algo más de profundidad. Una vez acabamos combates importantes (más o menos uno por cada acto), harán aparición unos sencillos quick time events para tratar de narrar de una forma más dinámica esas peleas, ya que de otra forma quedarían un tanto a medias tintas.
Neon Blood tiene su propio multiverso
Ya os hemos hablado de los aspectos narrativos y jugables de Neon Blood, así como de sus carencias. Cuando nos toca hablar del apartado artístico sólo tenemos alabanzas. En cuanto a los gráficos llaman mucho la atención la paleta de colores utilizada, así como el juego entre el 2D (personajes) y 3D (entornos). A lo largo de este análisis habréis visto referencias a otros títulos tanto cyberpunk, como de otros estilos y géneros. Sin embargo, creemos que tantas referencias (incluso a personalidades del medio español) sacan un poco de la historia.
Por otro lado la música es toda una delicia, claramente se inspira y bebe de otras grandes BSO de ciencia ficción cyberpunk, con esos ritmos pausados que nos hacen replantearnos si este es uno de los futuros que nos gustaría vivir.
Conclusiones de Neon Blood
Neon Blood es un título desarrollado por ChaoticBrain Studio, que en un principio parecía ser muy ambicioso, pero se ha quedado a medio camino. Su sistema de combate por turnos parece anunciarnos que es un RPG, cuando realmente no termina siéndolo. La historia comienza con muy buen pie, pero acaba decayendo en diálogos monótonos y con poca profundidad. Sentimos que los apartados narrativo y la jugabilidad no se encuentran al nivel del artístico, algo que, sin duda alguna, lamentamos profundamente.
El juego termina dando una sensación incompleta, como si en un principio fuese a tener más de tres actos, pero ciertas conclusiones… ¡Tendrán que esperar a que salga una segunda parte! Esperamos que, si este caso se cumpliera mejoren esos aspectos nombrados, pues el juego cuenta con un gran potencial no explotado. Creemos que para poder haber cumplido esto, la duración se elevaría a casi el doble de la que tiene realmente (quizás algo que planeaban sus desarrolladores en un principio), cuando este juego se completa ahora mismo en apenas tres horas.
Neon Blood
Adrián Jiménez
Bishamon
Miguel Ángel Díaz