Análisis Pepper Grinder: Érase un taladro a una niña pegado

Pepper Grinder es un título desarrollado por Ahr Ech y publicado por Devolver Digital que salió a la venta el pasado 28 de marzo en PC y Nintendo Switch. En The Art of Gaming nos hemos puesto manos a la obra, por lo que preparad vuestras herramientas y brazos, que toca utilizar el taladro.

Se trata de una aventura en 2D en la que para avanzar necesitaremos aprender a utilizar un taladro, que nos permitirá atravesar todo tipo de superficies. Encontramos muchos elementos característicos de los videojuegos de plataformas, tales como las monedas coleccionables (que se pueden utilizar como os explicaremos más adelante) o mecánicas específicas de cada nivel, ya sea montar en trineo, engancharnos a determinadas superficies o incluso manejar auténticas máquinas de destrucción.

Antes de contaros qué nos ha parecido Pepper Grinder, os dejamos con su tráiler:

A los piratas no les taladres la cabeza

En Pepper Grinder encarnaremos a Pepper, una joven pirata que tras un naufragio un tanto extraño (parece producido por otros malhechores), sólo le quedará su taladro llamado Grinder, que le ayudará a recuperar todos los bienes que le han sido robados. Esta es la premisa con la que empezaremos el título y realmente no se trata de una trama para nada enrevesada.

Este videojuego carece de diálogos, por lo que las únicas cinemáticas que veremos son la inicial, final y de los propios jefes. La historia se nos contará únicamente desde un plano visual, por lo que «la chicha» de Pepper Grinder se encuentra precisamente en su jugabilidad.

Un mundo al más puro estilo Mario Bros

Nuestro objetivo no será alcanzar la bandera y bajarla, sino al más puro estilo pirata (¿y obrero?) que será taladrar un mecanismo para izar la bandera. A lo largo de los niveles podremos hacernos tanto con oro como con monedas doradas. Las monedas doradas funcionan como coleccionables que estarán repartidas a lo largo de los niveles y que además podrán ser intercambiadas por distintos objetos (generalmente destinados a la compleción del título).

Los escenarios de Pepper Grinder

Si algo tiene este videojuego que engancha al jugador, son sus mecánicas. En cada escenario descubriremos una nueva habilidad de Pepper, ya sea colgarse de ganchos, disparar con armas especiales, montarnos en robots de guerra o incluso utilizar motos de nieve. Todo esto aporta un gran dinamismo al título, además de entretenimiento al jugador. Además, como se nos introducen poco a poco y de forma progresiva, es una buena forma de ir aumentándonos la dificultad (tal y como hace).

Por lo general Pepper Grinder no es demasiado difícil, aunque sí que nos hemos encontrado zonas complicadas, a veces por el propio manejo del taladro, los controles o simplemente alguna hitbox que no parecía encajar del todo a los enemigos. Esto todo se notaba en pequeños momentos de ofuscación, aunque nada que no sea arreglable en parches posteriores que favorezcan esos controles.

Los jefes por sí mismos serán una amalgama de mecánicas, ya que necesitaremos combinar todo lo ya aprendido con el fin de derrotarlos. Son muy entretenidos, aunque solo nos quejaremos sobre el tercero de ellos, que nos ha parecido que era un tanto injusto al mostrar animaciones muy confusas para el jugador.

Personaliza a Pepper (a Grinder no)

Como bien os adelantábamos antes, conseguiremos monedas en nuestro recorrido. Con ellas podremos:

• Personalizar a Pepper: Podremos cambiarle los colores tanto a su pelo como a su capa.
• Comprar páginas de pegatinas y pegatinas inspiradas en cada uno de los escenarios y los enemigos que habitan en ellos.
• Aumentar temporalmente nuestras barras de vida, de forma que nos faciliten algo el superar los siguientes niveles. Una vez que recibimos los golpes necesarios, desaparecerán las barras adicionales sin dejar rastro.

Cada escenario tendrá distintos niveles y entre ellos siempre encontraremos una tienda para que podamos prepararnos lo máximo posible frente a los enfrentamientos que nos aguarden.

Apartado artístico

No cabe duda alguna que el apartado gráfico de Pepper Grinder es muy llamativo y «resultón», además favorecido por los distintos entornos (playa, nieve, lava, ácido…) con los que nuestra pirata protagonista se irá dando de bruces.

Respecto a lo musical, cumple su función de acelerarnos más y más, ya que cuantas más acciones hagamos sin pausas y sin errores, más rápido nos iremos moviendo (o taladrando). De igual forma, el diseño de los sonidos es perfecto, incluso notando las diferencias acústicas cuando estamos bajo el nivel del mar.

Conclusiones

Pepper Grinder es un título que se presentaba innovador y, pese a no lograrlo del todo, sí que resulta muy entretenido y es bastante satisfactorio de completar. El título propicia bastante la rejugabilidad, ya que gracias a las monedas ocultas favorece que el jugador esté buscando todas las monedas con el fin de desbloquear todos los coleccionables disponibles en las distintas tiendas.

¡En The Art of Gaming lo hemos pasado en grande con él!