Hoy os traigo un juego muy antiguo diseñado para la NES y que fue lanzado en 1992 en Japón. Sin embargo, no hablaré de la versión original (que también he jugado) sino del remake que obtuvo en 2017.
Antes de hablar del juego tengo que decir que en mi opinión Nintendo es una de las compañías que mejores remakes hacen. Desde Pokémon Heartgold y Soulsilver para la DS hasta Zelda Link’s Awakening. Como de costumbre el remake del juego de NES no nos decepcionó.
Los juegos más actuales pertenecientes a la saga de Fire Emblem suelen seguir un patrón bastante fácil de identificar: una historia centrada en uno o mas personajes principales que van reclutando más personajes a lo largo de una historia dividida en capítulos. Cada capítulo es una batalla y el juego sigue un sistema de niveles que aumentan las estadísticas de los guerreros.
Sin embargo, debido a que es una adaptación de un juego mucho más antiguo este tipo de mecánicas eran muy diferentes y Nintendo decidió respetarlas apenas haciendo cambios en las más importantes.
Dividiré las características mas importantes del juego en diferentes puntos para comprender mejor sus diferencias con la versión original.
En primer lugar, una historia mucho mas trabajada pero sin duda mejor que la del juego anterior, Fates, que fue duramente criticado por su historia mal argumentada y aburrida, y por un protagonista sin personalidad. En este juego nos presentan dos protagonistas, Alm y Célica, que crecen juntos pero son separados por las circunstancias. La historia se desarrolla en un continente devastado por la guerra dividido en dos países donde ambos protagonistas tratan de alcanzar la paz de maneras muy diferentes. Cada uno de ellos simboliza un aspecto de las personas: Alm es la creencia en el ser humano, en su fortaleza y en la confianza en el poder para resolver la guerra, mientras que Célica representa una vía más pacífica basada en la creencia de que los dioses los salvaran y que no pueden hacer nada sin su ayuda. Aunque son amigos de la infancia las ideas de ambos los enfrentan y les obligan a seguir sus ideales separados. Aparte de una historia muy completa y profunda, el juego destaca por unos personajes desarrollados cuyas vidas se entrelazan a lo largo del juego y con uno de los mejores antagonistas que he conocido en un juego.
En segundo lugar, las mecánicas de combate son completamente distintas a la mayoría de fire emblem de los últimos años. La mayoría de estos siguen la regla del triangulo de armas (espada vence a hacha, hacha vence a lanza, etc) mientras que este la ignora por completo eliminando además la categoría de hacha del inventario del juego. Cada arma tiene unas habilidades propias que se desarrollan cuanto mayor sea el uso de esa arma y pueden ser modificadas en las forjas para evolucionar a versiones con mayor daño o habilidades nuevas. En el área de las habilidades podemos observar que a diferencia de los juegos recientes ejecutarlas no consume la duración de las armas sino la vida del usuario. Por ejemplo Curar es una habilidad de apoyo y tan solo consume 1HP mientras que Ragnarok (una magia de ataque) consume 10HP. La ultima gran mejora es que en vez de haber un grupo principal ambos protagonistas avanzan separados, cada uno con un ejercito propio, pero las acciones de ambos afectan al otro llevando la estrategia fuera del campo de batalla y haciéndote reflexionar los movimientos que realices para avanzar por el mapa.
Finalmente, el ambiente general del juego es magnífico. El aspecto físico de los personajes abandona el estilo excéntrico de Fates y vuelve a una coloración y vestiduras más clásicas, propias de la época en la que se desarrolla la acción. El nivel de dificultad es perfecto ya que el juego no te exige farmear niveles para superar los combates sino estrategias elaboradas. Además cuenta con uno de los mejores soundtracks de la saga con diferencia convirtiendo algunos momentos de la historia en escenas mucho mas emotivas o épicas.
En resumen, aconsejo este juego a cualquier fan de los RPGs de estrategia. Destaca mucho por su historia y su sistema de combate, pero también cuenta con un postjuego muy interesante donde volvemos a la tierra de uno de los héroes mas famosos del juego (no hare spoilers). Sin duda alguna uno de los mejores juegos de la saga sino el mejor y uno de los mejores remakes de Nintendo que respetó el juego original, añadiendo cambios que solo fueron mejoras sin destruir la historia original ni sus personajes.