AlbaCuando volví al gaming hace unos años… lo hice con un sandbox. Puede parecer superficial, podría decir que volví con Final Fantasy VII. Pero volví con Minecraft. La posibilidad de vivir mi propia aventura, construir mi refugio, decidir el tiempo en que hago una u otra cosa, la dirección en que explorar… En definitiva, crear mi historia. Y Necesse es uno de esos juegos que me hacen volver a sentir lo mismo. Bueno, casi lo mismo.
Necesse es un sandbox con tintes de supervivencia tipo Minecraft. Es decir, el jugador va a ir de mina en mina consiguiendo mejores minerales con las que hacerse mejores armaduras y derrotar a algún que otro boss. Concretamente, este muestra una perspectiva top-down que puede recordar mucho a Core Keeper, pero en la superficie. Además, también tiene cierto punto de videojuego de gestión que puede recordar lejanamente a Rimworld por poder ampliar el asentamiento con colonos, que se unirán al pueblo al entregarle ciertos objetos. Cada uno de estos colonos tendrá un título como “cazador” o “pescador”, indicando cuál es la tarea que mejor se me da, pues es el jugador el que decidirá qué tareas va a realizar y con qué prioridad las realizará.
Un vasto mundo por el que perderte
Uno de los detalles que más me han gustado es el amplio mapa por el que se puede viajar. Al principio parece que el jugador estará en una sola isla, pero si mira el mapa del mundo verá que es una de tantas a las que podrá viajar en cuanto se fabrique un barco, que puede ser en los primeros compases de la aventura. Cada isla tiene un bioma y, por lo general, un tipo de mazmorra en el que poder perderse, derrotando enemigos y consiguiendo nuevos materiales.
Para no perder el horizonte está el anciano de la primera isla, que irá dando misiones al jugador referentes a los jefes que tiene que derrotar y dónde encontrarlos (el primero en esa misma isla, el segundo en una isla de tundra…). Además, está el diario del aventurero que propone ciertos desafíos que cumplir en cada bioma, con recompensas cosméticas que incentivarán al jugador.
El estilo artístico es pixelart. Sin embargo, habiendo numerosos juegos con el mismo estilo artístico, es cierto que este título debería pulir un poco más su estilo. La profundidad del pixelart es mínima, y la diferenciación de los objetos en el inventario a veces cuesta un poco. No obstante, cumple con sus funciones y permite jugar el juego. En lo musical puede verse que han bebido, sobre todo, de los RPG. A veces la música es más protagonista que en el resto de títulos del género, recordando el tema de la isla principal a títulos como Sea of Stars. Esto, por supuesto, es algo positivo.
El movimiento al principio es algo lento, pero no se tardará mucho en conseguir unas botas o algún objeto que aumente la velocidad de movimiento, agilizando la tosquedad que el personaje tiene al principio. Sucede lo mismo con el combate: sin ser especialmente difícil en ningún momento, pronto el jugador conseguirá nuevas armas y armaduras con las que mejorar. No obstante, no es oro todo lo que reluce, pues estas mejoras vienen tan deprisa que harán que los combates contra los jefes sean demasiado fáciles si el jugador ha conseguido las armas y armaduras correspondientes.
La curva de dificultad de Necesse es algo extraña precisamente por ello: conseguir las mejores armas de un momento del juego hacen demasiado fácil derrotar al boss que desbloquea el siguiente punto, donde luchar con ese arma es, de repente, muy difícil. Esto sucede en títulos como Terraria, por lo que podría considerarse que forma parte del género.
El sistema de gestión del asentamiento presenta luces y sombras. Si bien es muy placentero y genera recompensas con muy poco, por otro lado es superficial y sencillo. No presentan diferencias sobre dónde querrían su casa, si quieren algunos muebles especiales respecto a su profesión. El requisito del tamaño suma 40 puntos de felicidad (de un total de 100) si vive en un zulo de 3×3 tiles, indicando que es un espacio diminuto, pero aportando casi la mitad de puntos de felicidad.
Pueden entrar en una partida hasta 25 personas
Por otro lado, está el multijugador. Para mayor inmersión he jugado este juego con una persona más, y ha sido la mejor decisión por las situaciones graciosas y el trabajo en equipo. Los monstruos se nivelan al número de jugadores que hay. Además, lo más increíble es que pueden entrar en una partida hasta veinticinco personas, cosa que me parece una locura. Este juego es perfecto para grupos de amigos grandes que a veces podían dejar en nada aquellos juegos que permiten ocho y hasta doce jugadores.
Necesse se parece mucho a otros juegos, sí. Sin embargo, lo que lo hace único es la mezcla de ingredientes que permite disfrutar de las características de un sandbox de supervivencia y un juego de gestión.
En definitiva, Necesse es un buen videojuego. Tiene ciertos puntos que pulir, pero no podemos olvidar que está en un Early access, y el camino es largo todavía. Además, muchas de las cosas que tiene que mejorar tienen más que ver con números que con otra cosa. Si lo consiguen, el tamaño del mundo y el número de jefes que tiene prometen un videojuego extremadamente bueno y adictivo. Solo queda una pregunta en el aire… ¿Cuándo se acaban estos juegos? Los créditos no siempre son el final, y dejar mi isla ahora me da un poco de pena…
Este análisis ha sido posible gracias a una clave facilitada por Keymailer.co
Necesse
Miguel Ángel Díaz
Sergio Calzón